La obra más reciente de Luis Hernández Mellizo presentada en este espacio sigue consecuentemente su obra anterior. La pregunta conceptual a la que contesta tiene un sinfín de características, dadas por las múltiples disciplinas y técnicas en que se apoya. Sin embargo, la pregunta es la misma, y no por esto, la respuesta es simple; porque como tal, el valor de esta obra está en las ideas y no en los objetos. Los objetos aquí no tienen valor alguno, este se encuentra más bien en el tiempo y en el espacio ocupado por el quehacer del artista y la relación con su entorno.