Natalia Castañeda (Manizales, 1982) se aproxima al paisaje a través de la idea de la contemplación, método que le ha permitido comprender el entorno y las formas que integran el territorio. Se acerca a la naturaleza, entendida como entidad sublime, desde la pintura, el dibujo y la escultura, en un proceso donde se pregunta por lo efímero de los elementos naturales, contrastado a la permanencia de los objetos creados por el ser humano.

Su obra hace parte de las colecciones del Banco de la República de Colombia, la Fundación Cisneros Fontanals -CIFO, el Museo de Antioquia, entre otros.

Vive y trabaja en Barcelona.